Imagina que estás a punto de salir de casa y tu bebé comienza a llorar desconsoladamente, extendiendo sus brazos hacia ti y negándose a soltarte. Esta escena es común y se conoce como ansiedad por separación. ¿Por qué ocurre y cómo puedes manejarla sin afectar el vínculo madre-hijo? A continuación, te ofrecemos información clave y estrategias efectivas para afrontar esta etapa.

¿Qué es la ansiedad por separación en bebés?

La ansiedad por separación es una fase normal en el desarrollo de los bebés, caracterizada por el malestar que sienten al separarse de sus cuidadores principales. Suele manifestarse entre los 6 y 12 meses de edad, alcanzando su punto máximo alrededor de los 18 meses, y generalmente disminuye hacia los 24 meses. Durante este período, los bebés desarrollan un fuerte apego a sus padres y aún no comprenden completamente que las personas existen incluso cuando no las ven, lo que se conoce como “permanencia del objeto”. Esta falta de comprensión les genera angustia al separarse de sus figuras de apego.

Causas de la ansiedad por separación

Esta ansiedad es una señal positiva del desarrollo emocional y cognitivo del bebé. Algunas causas que pueden intensificarla incluyen:

  • Cambios en la rutina: Iniciar la guardería o cambiar de cuidador puede aumentar la ansiedad.
  • Nuevas experiencias: Situaciones desconocidas o la presencia de extraños pueden generar inseguridad.
  • Desarrollo cognitivo: A medida que el bebé comprende más su entorno, puede volverse más consciente de las separaciones.
  • Estados físicos: El hambre, el cansancio o el malestar físico pueden hacer que el bebé sea más propenso a la ansiedad por separación.

Signos de ansiedad por separación

Es importante reconocer los signos para poder actuar de manera adecuada. Algunos indicadores son:

  • Llanto intenso al separarse de los padres.
  • Apego excesivo, mostrando resistencia a estar con otras personas.
  • Interrupciones en el sueño, despertando frecuentemente durante la noche.
  • Rechazo a estar con extraños o en entornos desconocidos.
  • Miedo a estar solo, incluso por cortos períodos.

Estrategias efectivas para manejar la ansiedad por separación

A continuación, se presentan algunas estrategias que pueden ayudar a tu bebé a afrontar esta etapa:

1. Practicar separaciones breves

Comienza dejando a tu bebé con un cuidador familiar durante cortos períodos. Esto le ayudará a acostumbrarse a tu ausencia y a entender que siempre regresas.

2. Establecer rituales de despedida

Crear una rutina consistente al despedirte, como un beso especial o una frase cariñosa, puede brindar seguridad a tu bebé y hacer que las separaciones sean más predecibles.

3. Fomentar la independencia

Anima a tu bebé a jugar solo o con otros, permitiéndole explorar su entorno bajo tu supervisión. Esto fortalecerá su confianza y reducirá la ansiedad en futuras separaciones.

4. Mantener la calma y ser consistente

Tu actitud al despedirte influye en la reacción de tu bebé. Despídete con tranquilidad y confianza, evitando prolongar el momento. La consistencia en tus acciones le ayudará a entender que las separaciones son temporales.

5. Introducir nuevos cuidadores gradualmente

Permite que tu bebé pase tiempo con nuevos cuidadores en tu presencia antes de dejarlos solos. Esto facilitará la transición y aumentará su comodidad con otras personas.

6. Evitar despedidas furtivas

Aunque pueda parecer más fácil salir sin que tu bebé se dé cuenta, esto puede aumentar su ansiedad. Es importante que sepa que te vas y que volverás.

7. Proporcionar objetos de consuelo

Dejarle a tu bebé un objeto familiar, como una manta o un juguete favorito, puede brindarle seguridad en tu ausencia.

8. Respetar sus emociones

Valida los sentimientos de tu bebé, reconociendo su angustia y brindándole consuelo. Esto refuerza su confianza en que sus emociones son comprendidas y atendidas.

Cuándo buscar ayuda profesional

Si la ansiedad por separación de tu bebé es intensa, prolongada o interfiere significativamente en su vida diaria, es recomendable consultar a un pediatra o especialista en desarrollo infantil. Ellos podrán ofrecer orientación y, si es necesario, derivarte a un profesional especializado en salud mental infantil.

Reflexión final

La ansiedad por separación es una etapa normal en el desarrollo de tu bebé y una señal de un apego saludable. Con paciencia, comprensión y las estrategias adecuadas, puedes ayudar a tu hijo a superar esta fase y fomentar su independencia y seguridad emocional. Recuerda que cada niño es único; lo que funciona para uno puede no ser efectivo para otro. Observa y adapta las estrategias según las necesidades de tu bebé, siempre brindándole amor y apoyo incondicional.